El vendedor debe ser dueño de su propio destino y ser responsable de su propio éxito, manteniendo una actitud positiva y centrada en sus objetivos.
El pergamino también enfatiza la importancia de aprender de las experiencias y los errores, y de tener un deseo ardiente de alcanzar el éxito.
El vendedor debe ser persistente y no rendirse ante los obstáculos, sino que debe usarlos como oportunidades para crecer y mejorar.
Adaptando esta enseñanza a la era digital y de las redes sociales, podríamos decir que es importante tomar un tiempo para reflexionar sobre nuestra presencia en línea y cómo podemos mejorarla. Aquí te dejo 3 recomendaciones prácticas.
Deja atrás el pasado: Si has tenido una mala experiencia en línea, ya sea una mala crítica o un malentendido, es importante dejarlo atrás y seguir adelante. Aprende de los errores del pasado y utiliza esta experiencia para mejorar tu presencia en línea.
Adopta una actitud positiva: En lugar de centrarte en las dificultades, enfócate en las oportunidades que te brinda la era digital y las redes sociales. Adopta una actitud positiva y proactiva para enfrentar los desafíos en línea.
Establece objetivos claros: Define tus objetivos en línea y trabaja en un plan de acción para lograrlos. Ya sea que busques construir una marca personal o una presencia empresarial, establece metas claras y realistas y trabaja en ellas cada día.